En las boquillas estándar de cono lleno las gotas se distribuyen en un volumen que está limitado por un cono para distribuir de manera uniforme el flujo de agua sobre una superficie. Debido a la velocidad de rotación del fluido, el agua que sale del orificio de la boquilla se somete a una fuerza centrífuga y se abre en forma de cono lleno. La forma de la punta determina el rango de pulverización. Típicamente son aplicadas en la industria acerera en procesos de control de temperatura de gas en la parte superior de horno, enfriamiento de acero, enfriamiento y cubierta del horno eléctrico, control de polvos, etc.