Las bombas centrífugas verticales cumplen con la norma API 610 asegurándoles alta fiabilidad en las condiciones de proceso más difíciles en la industria de petróleo y gas, y petroquímica. Son ideales para bombear fluidos a presiones medias y altas. Los procesos de fabricación garantizan el más alto nivel de calidad e incluyen equilibrio dinámico del rotor, pruebas hidrostáticas y de rendimiento, medición de flujo, eficiencia del cabezal, NPSH, vibraciones y el control de calidad más riguroso.